7 Hábitos saludables para tu rutina de mañanas

A mi modo de ver, las mañanas son un nuevo comienzo, una nueva página en blanco de 24 horas que tiene que ser rellenada durante el día.

Por lo tanto, lo que hagas al inicio de la mañana puede influir en tu estado de ánimo para el resto del día. Empezar el día con ganancias, con energía y viéndote y sintiéndote mejor puede generar un efecto dominó que te haga sentir mejor y más productivo durante el resto de tu día.

Te dejo por aquí siete hábitos saludables que tienes que hacer cada mañana para empezar el día de la mejor forma posible.

1 Empezar la mañana con un vaso de agua

Empezamos con lo que quizá es lo más importante y es que debes comenzar tus mañanas bebiendo un vaso de agua. Después de haber estado durmiendo durante horas, tu cuerpo está deshidratado y necesita rehidratarse.

Está comprobado que beber agua nada más despertarse activa tus órganos y puede ayudarte con tu metabolismo y digestión a lo largo del día.

2 Estirar los músculos y la columna

Después de horas sin funcionamiento, tus músculos y, en especial, tu columna, están agarrotados. Cuando te estiras permites una movilidad y un rango completo que te ayuda a desarrollar la estructura muscular y aumentar el flujo sanguíneo.

Entiendo que hay personas que van un poco justas de tiempo por las mañanas, pero basta con una pequeña rutina de estiramiento de 2 o 3 minutos para conseguir estos efectos, mejorar la circulación y la postura corporal.

3 Seguir una rutina de aseo y ducharse por la mañana

Tener una rutina de aseo completa y planificada es esencial para verte y sentirte mejor. Esta rutina debe incluir un lavado de cara con jabón limpiador, el uso de crema hidratante y una ducha corta.

Hay gente que prefiere ducharse por la noche pero, piénsalo bien, llevas muchas horas en la cama y tienes la piel y el pelo llenos de sudor y aceites corporales.

Una ducha matutina te ayuda a limpiar tu piel, a oler mejor durante el día y te despejará del todo.

4 Poner música para hacer las cosas

Por la mañana hay distintas tareas que hacer, ya sea ducharse, lavar o planchar ropa o preparar el desayuno. Lo que sea que tengas que hacer prueba a hacerlo mientras escuchas música.

Puede ser cualquier cosa, música que te motive, que te inspire o incluso escuchar algún podcast que te guste. De esta manera ayudamos al cerebro a despertarse y a que empiece a trabajar antes de que empiece nuestro día

5 Ingerir tu dosis de vitamina D

Este punto lo dividiremos en dos partes. Lo primero, es importante dejar que entre en casa luz natural para mandarle señales al cerebro de que ya es de día. Esto ayuda a tu reloj natural a ubicarse y darse cuenta de que es momento de despertarse y ponerse en funcionamiento.

Por otro lado, es importante mantener nuestros niveles de vitamina D altos, ya que tienen una relación directa con el fortalecimiento de nuestro sistema inmune.

Te dejo por aquí un link por si quieres saber más sobre qué es la vitamina D y sus beneficios en nuestro organismo.

Basta con consumir una perla cada mañana para aumentar nuestros niveles de vitamina D y, por tanto, nuestras defensas.

6 Despertarse tan pronto como suene la alarma

A pesar de que a mucha gente le parece algo imposible, es una acción fácil que todo el mundo puede hacer.

En vez de posponer la alarma cada vez que suena, intentando arañar minutos para seguir durmiendo, proponte apagarla y levantarte a la primera.

Este pequeño gesto es muy poderoso, cuando lo haces empiezas el día ganando, realizando una acción que quizás no te apetece pero que te ayuda a entrar en una mentalidad ganadora para poder seguir ganando el resto del día.

7 Tomar un desayuno saludable

Aquí existen distintas opiniones, ya que hay personas que son incapaces de tomar alimentos por la mañana y prefieren ayunar.

A nivel personal, es algo que necesito. La comida son calorías, es decir energía que nuestro cuerpo necesita para estar todo el día haciendo cosas y funcionar de la manera adecuada. Por supuesto es importante que este desayuno sea equilibrado y sus calorías sean nutritivas y saciantes.

Dependerá de los gustos de cada persona, pero algunos ejemplos de buenos alimentos para empezar el día pueden ser: huevos, tostadas con aceite de oliva, yogur natural, aguacate, atún o fruta.